Jürgen Klopp llegó al Liverpool con el objetivo de crear un equipo competitivo que pueda competirle al resto del Big 6 de la Premier League. Si bien el conjunto de Anfield había tenido alguna temporada buena con Luis Suárez a la cabeza, la realidad es que desde el mejor momento futbolístico de Steven Gerrard allá por el 2006, el Liverpool no podía ser protagonista de los distintos torneos que debía disputar. Sin embargo, el entrenador alemán reescribió la historia actual del club.

Lo increíble del trabajo de Klopp no es solamente que logró ganar una Champions League después de 14 años, y de ganar una Premier League luego de 30 años; sino que la sorpresa está en el proyecto que armó en el club. Porque de por sí, el Liverpool es un equipo que históricamente le ha dado lugar a las jóvenes promesas de su cantera, pero el alemán le agregó un sistema de captación de enormes estrellas. Porque la realidad es que actualmente el Liverpool tiene figuras de la estatura de Mohamed Salah y Sadio Mané por este gran trabajo que realizó Klopp.

¿Hace cuánto que el Liverpool no ganaba la FA Cup?

Y cuando se creía que el entrenador alemán no tenía marca por romper, logró quebrar nuevamente una mala racha que arrastraba el club. Luego de vencer al Chelsea por penales, el conjunto de Anfield logró levantar la FA Cup después de 16 años. Pero lo destacable es que antes de esta edición, el Liverpool solamente la pudo ganar en 2 ocasiones desde que inició el Siglo XXI.

Al igual que sucedió en la final de la Copa de la Liga, el Chelsea y el Liverpool se sacaron chispas durante todo el partido. A pesar de que los dos equipos tuvieron contadas ocasiones para mover el marcador, ninguno tuvo la puntería fina para acertarle al arco. Mientras que por el lado del Liverpool el mejor jugador fue Luis Díaz, quien tuvo dos remates de afuera que se fueron muy cerca, en el Chelsea se destacaron los laterales: Reece James y Marcos Alonso.

Si bien todo se terminó decidiendo en la lotería de los penales, en el trámite del partido el Liverpool fue un poco más. Sin embargo, el gran problema que tuvo Klopp es que en el primer tiempo tuvo que sustituír a Mohamed Salah porque detectó una molestia y no quiso arriesgar su físico; y algo similar sucedió con Virgil van Dijk al terminar los 90 minutos. Por lo que el equipo de Anfield tuvo que jugar con una idea distinta.

Ahora los dolores de cabeza los tendrá Klopp porque tendrá que tomar una decisión muy importante. Teniendo en cuenta que en 14 será la final de la Champions League contra el Real Madrid, tendrá que determinar qué hará en la Premier League. Porque si bien se encuentra a 3 puntos del Manchester City, es muy poco probable que deje puntos en los 2 partidos que restan por la liga. Entonces, en ese caso el entrenador arriesgaría a los titulares sin ningún sentido.